INSTAMOS A LA PROTECCIÓN DE NIÑOS Y NIÑAS MIGRANTES Y SOLICITANTES DE ASILO EN LA FRONTERA ENTRE BIELORRUSIA Y LA UE

Los informes recogen que más de 5.000 personas han estado haciendo frente a condiciones de frío extremo a lo largo de la frontera entre Bielorrusia y Polonia. 

Pedimos que se proteja de cualquier forma de violencia a todos los niños y las niñas solicitantes de asilo, refugiados y migrantes en la frontera entre Bielorrusia y la UE y que se dé una respuesta a sus necesidades de protección, refugio, alimentos, agua y tratamiento médico. 

La actual crisis humanitaria en la frontera entre Bielorrusia y la UE ha causado al menos diez muertes y ha dejado a miles de personas, incluidos niños y niñas, abandonados en condiciones cada vez peores, agravadas por el duro invierno, la pandemia de la COVID-19 y la violencia.  

Las niñas y las jóvenes refugiadas y migrantes están especialmente expuestas a la violencia, los abusos sexuales y la explotación.  

Un portavoz de Plan International ha manifestado que “las niñas y las jóvenes refugiadas y migrantes están especialmente expuestas a la violencia, los abusos sexuales y la explotación. Es terrible que tantas de ellas tengan que luchar diariamente por su supervivencia en condiciones de frío extremo. El momento de actuar es ahora”.    

Todos los niños, niñas y jóvenes desplazados tienen derechos específicos que vienen garantizados por el derecho internacional humanitario, sin discriminación y con independencia de su estatus de refugiado, solicitante de asilo o migrante o de cualquier otra razón que le haya llevado a ser una persona desplazada.  Debe respetarse el principio de no devolución, lo que significa que ninguna persona debe ser devuelta a un país en el que pudiera estar en peligro. 

LAS AUTORIDADES DEBEN RESPETAR LOS DERECHOS DE TODOS LAS PERSONAS IMPLICADAS 

Según informes recientes, ha habido más de 5.000 personas haciendo frente a condiciones de frío extremo a lo largo de la frontera entre Bielorrusia y Polonia. La mayoría son población kurda de Irak, pero también hay personas de Siria, Irán, Afganistán, Yemen y Camerún, entre otros países. Hay grupos extremadamente vulnerables entre las personas atrapadas en esta situación: niños y niñas separados o no acompañados, mujeres jóvenes, mujeres embarazadas, familias con niños y personas con discapacidad. 

Plan International insta a todas las autoridades implicadas a respetar los derechos humanos, la seguridad y la dignidad de los niños, niñas y adultos implicados en esta crisis y a permitir el acceso de las organizaciones humanitarias a la zona fronteriza para que puedan atender las necesidades urgentes de las personas solicitantes de asilo y migrantes.