Adriana, del bullying a la confianza

Adriana es una adolescente venezolana amante de los animales y el medio ambiente. La joven llegó a Tacna-Perú desde su natal Venezuela, y ahí conoció a Plan International, gracias al proyecto “Entornos Seguros” implementado con el apoyo de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR). 

Al igual que más de 6 millones de venezolanos y venezolanas, su familia tuvo que tomar la difícil decisión de emigrar de su país debido a la compleja situación social y económica. Para ella, a sus 14 años, ha sido un proceso “duro” donde el mayor reto ha sido “adaptarse a una nueva cultura y la forma de hablar”, comenta. 

Adriana recuerda que en Venezuela era más extrovertida, su personalidad ha cambiado desde que salió de su país. Ahora se describe como una adolescente más retraída y tímida, en comparación a cuando era niña. Haciendo una autoevaluación, la adolescente se considera de carácter fuerte, pero a la vez sensible, sobre todo a las injusticias y actos de discriminación que ha visto y experimentado. 

Sus primeros meses en la escuela en Perú fueron difíciles pues sufrió situaciones de bullying. Según cifras del estudio de “Girls in Crisis” elaborado por Plan International en 2021, el 28% de niñas y adolescentes encuestadas reportaron no estar estudiando y quienes logran acceder a este derecho se encuentran con otras barreras como la xenofobia y violencia escolar. 

“Cuando llegué a Perú desde Venezuela, adaptarme a mi colegio fue muy difícil. Sufrí xenofobia, especialmente por parte de mis compañeros, quienes, en lugar de mostrar empatía por mi situación, simplemente se burlaban de mí por ser diferente”, nos cuenta Adriana. 

Asimismo, ella resume esta experiencia como algo “duro y un poco desmotivador”, le afectaban mucho los comentarios que hacían sus compañeros y compañeras sobre las y los venezolanos. Todo esto bajó su autoestima, mientras que le afectaba cada vez más todos los casos de maltrato a migrantes y refugiados que vio. En muchos casos eran personas cercanas a ella, que no pedían ayuda ya que habían normalizado estas situaciones como parte de su proceso de “aceptación” en un nuevo país.  

Sin embargo, gracias a los talleres del proyecto “Entornos Seguros” de Plan International y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Adriana siente más seguridad y confianza al relacionarse con sus pares, y ahora ya no tiene temor de expresar lo que siente o piensa. Sabe que es importante la empatía con los demás y está aprendiendo sobre sus derechos y deberes como adolescente y migrante. 

“Realmente, disfruto mucho de las clases. Aunque mis compañeros siguen comportándose igual, ya nos les presto tanta atención. A veces trato de decirles ‘oye, no digas eso, te puedo explicar sobre este tema y por qué está mal”, comenta con una sonrisa. 

Ella a su vez comparte sus conocimientos con su familia: “Todo lo que aprendo en los talleres de Plan International no es solo para mí. Cuando llego a casa le cuento a mi abuelita todo lo que aprendo, también cuando tengo alguna oportunidad de explicarle a alguien, aprovecho para hacerlo. Siento que es importante compartir el conocimiento y las experiencias. Puedo ayudar a más personas migrantes como yo”, afirma.  

Adriana trata de hacer memoria y se dirige a su yo de cuando este proceso de cambio comenzó diciéndose que todo va a mejorar. Ahora sabe que es una adolescente empoderada con muchos sueños por lograr y está segura que los logrará. 

Con mucha seguridad, quiere dirigir unas palabras a otras niñas migrantes y aconseja que no hagan caso a comentarios negativos hacia su país, ellas o sus familias: “Traten de que no les afecte, eviten a esas personas que solo buscan molestarlas; luchen por sus sueños y por los de sus familias. Estén juntos que es lo más importante”. 

Sobre el proyecto Entornos Seguros 

Entornos Seguros, una iniciativa de Plan International Perú con el apoyo de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Unión Europea, busca contribuir a que niñas, niños, adolescentes, jóvenes venezolanas/os logren una integración real a sus comunidades por medio de acciones dirigidas a educación, protección de la niñez, participación juvenil, emprendimiento e integración sociocultural.