Las inundaciones en Níger arrasan las zonas agrícolas y dejan 20 muertos

Veinte personas han fallecido y otras 50.000 han resultado afectadas a causa de las fuertes lluvias que azotan Níger desde el pasado 29 de agosto. En Niamey, la capital del país, el río Níger amenaza con desbordarse causando graves problemas de seguridad a las poblaciones asentadas en las inmediaciones del cauce.

03 de septiembre de 2013. Veinte personas han fallecido y otras 50.000 han resultado afectadas a causa de las fuertes lluvias que azotan Níger desde el pasado 29 de agosto. En Niamey, la capital del país, el río Níger amenaza con desbordarse causando graves problemas de seguridad a las poblaciones asentadas en las inmediaciones del cauce. Pero las regiones más devastadas, de acuerdo con la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA), han sido Dosso y Tillaberi, donde Plan Internacional está trabajando para paliar las necesidades y proteger a los más de 20.000 niños y niñas apadrinados que viven en la zona.

Las abundantes lluvias han devastado el país en cuestión de horas: desde el norte nómada, pasando por la zona de pastoreo del centro, hasta el sur agrícola. Aldeas y centros urbanos han quedado destrozados.  Según fuentes de la ONU “La región central de Maradi es la más afectada, con nueve muertos y 19.425 desplazados, en Agadez, en la desértica región del norte se han registrado precipitaciones sin precedentes y el número de muertos asciende a cuatro?. Esta situación ha dejado a miles de personas desprotegidas ante la inminente necesidad de recibir refugio, alimentos y otros artículos de primera necesidad.

A día 30 de agosto el río Níger había alcanzado su nivel máximo en el Delta, quedando registrada la caída de 1.291 metros cúbicos de agua por segundo; según las autoridades nigerianas se trata del mayor aumento del nivel del río en la última década. Pese a que la situación se ha estabilizado en las últimas horas, Plan Internacional ha puesto en marcha una estrategia de respuesta de alerta media para fortalecer y proporcionar ayuda inmediata a los afectados en caso de que empeorara la situación. Así, el Gobierno nigeriano ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que proporcionen asistencia continua a las regiones más afectadas, Maradi, Tahoua, Diffa y Dosso. Pese a la estabilización meteorológica se prevé que las necesidades humanitarias aumentarán sustancialmente debido al desplazamiento masivo de la población nigeriana a aldeas y ciudades colindantes con la zona afectada.