Mosquiteras que salvan vidas

Zamtaoko Mamounata no es una mujer más del poblado. 'Zam' o 'Zambo', como es conocida cariñosamente, es una verdadera líder dentro de su familia y su comunidad. Hace 13 años, justo después de la muerte de su marido, comenzó a encontrarse mal y sentirse enferma. Se hizo la prueba del VIH y dio positiva. Su espíritu de superación y fortaleza han hecho de ella un referente a seguir para sus vecinos.

 

En la localidad de Silmiogou, en Burkina Fasso, uno de los países africanos más azotados por la malaria, Zamtoko Mamountana observa a su vecina montar la mosquitera para su hijo pequeño y le aconseja: “Inviertes  mucho  tiempo en montarla, ¿por qué no haces cuatro agujeros en las esquinas y las atas a los postes cerca de  la puerta? Así ahorrarás tiempo y energía cada noche.”

Las mosquiteras se han convertido en un instrumento indispensable para esta pequeña comunidad de Bukina Fasso, país africano en el que se diagnostican más de dos millones de casos al año de esta enfermedad, y  mueren unas 26.000 personas. Aunque al principio había desinformación sobre su uso y mantenimiento, ahora forman parte de la rutina diaria en la época de lluvias. “Debemos lavarlas tres veces al mes con agua fría y un jabón suave. Después las dejamos secar a la sombra. Así el producto repelente dura más y mantiene alejados a los mosquitos”

Se han distribuido mosquiteras impregnadas de insecticida en 13 regiones de Burkina Faso, como parte de la campaña para combatir la malaria del Fondo Global. Este proyecto se enmarca dentro del ?Programa de Apoyo al Desarrollo de la Salud? (Programme d?Appui au Développement Sanitaire) en el que PLAN trabaja conjuntamente con organizaciones locales.

Un referente para su comunidad

Zamtaoko Mamounata no es una mujer más del poblado. ‘Zam’ o ‘Zambo’, como es conocida cariñosamente, es  una verdadera líder dentro de su familia y su comunidad. Hace 13 años, justo después de la muerte de su marido,  comenzó a encontrarse mal y sentirse enferma. Se hizo la prueba del VIH y dio positiva. Su espíritu de superación y fortaleza han hecho de ella un referente a seguir para sus vecinos.

 

Ahora Zam enseña a sus vecinos nociones básicas sobre prevención y tratamiento de enfermedades como el sida, la malaria o simples resfriados. Su casa está completamente cubierta, no puedes poner un pie hasta después de las 8 de la mañana, cuando quitan las mosquiteras. ?Me protejo de los mosquitos y del resto de insectos, así no me molestan mientras estoy descansando. Cuando nos dieron las mosquiteras debíamos tapar todos los agujeros de la casa. He estado convenciendo a todo el mundo para que las use dentro de casa, e intento dar ejemplo protegiendome a mí y a mi familia con ellas? afirma Zam. ?Teniendo sida es muy importante protegerse contra los mosquitos, ya que la malaria acelera la enfermedad?

Las mujeres han cogido las mosquiteras sin pensarlo, especialmente Raiketa Yameogo que pasaba toda la estación de lluvias obsesionada con la malaria. Durante diez años consecutivos ha sufrido fuertes ataque de malaria, pero este año es el primero que se encuentra bien. ?Gracias a la mosquitera he logrado librarme de los terribles dolores de cabeza, los vómitos y las altas fiebres que acababan por mandarme al hospital dónde me ponían un inyección intravenosa. Las otras mujeres me llamaban ?la mujer del suero?, pero espero que eso ya sea parte del pasado?

En el ambulatorio local las cifras hablan por sí solas. En abril de 2010, 27 niños menores de cinco años y 19 niños mayores fueron tratados por malaria. Este año solo ha habido cuatro y tres casos respectivamente.