Aunque la peor parte de la pesadilla ya haya pasado para las familias de las chicas liberadas, es importante recordar que miles de niñas, niños y adolescentes han desaparecido en la región del lago Chad durante los últimos siete años. Muchos permanecen cautivos, sometidos a todo tipo de abusos por parte de Boko Haram, lo que incluye matrimonios forzados, violencia sexual y situaciones de esclavitud.
Plan International expresa su más profunda solidaridad con todos los niños, niñas y jóvenes, especialmente con las chicas adolescentes que han sido víctimas de Boko Haram, y hace un llamamiento para la liberación inmediata de todos aquellos que permanecen secuestrados.
Las chicas que vuelven a sus comunidades tras escapar del cautiverio deben enfrentarse a los estigmas sociales y la exclusión. Plan International trabaja con ellas en Nigeria para ofrecerles apoyo psicosocial y garantizar su acceso a servicios sanitarios. También reciben apoyo de la organización para reintegrarse en sus comunidades, ofreciéndoles oportunidades académicas y formación que les permita mantenerse en el futuro.
Felicitamos al Gobierno nigeriano y a todas las partes involucradas en la liberación de las jóvenes y les instamos a redoblar los esfuerzos para conseguir la liberación del resto de los secuestrados y garantizar un entorno de seguridad, resiliencia y no violencia en el que niñas y niños puedan disfrutar de sus libertades fundamentales y sus derechos humanos.