Plan International responde a la erupción del volcán Fuego En Guatemala

El Presidente de la República ha declarado el “estado de calamidad pública” en los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango, afectados por la erupción. Plan International ha puesto en marcha su respuesta humanitaria para apoyar a la infancia.





Plan International, organización que trabaja por los derechos de la infancia y la igualdad de las niñas presente en Guatemala desde 1978, ha iniciado la ayuda humanitaria en el país tras la erupción del volcán Fuego. La organización ya está repartiendo 500 colchones y 500 kits de sábanas en los refugios donde se encuentran las personas afectadas, en coordinación con la ONU, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) y otras ONG.

El Presidente de la República ha declarado el “estado de calamidad pública” en los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango, afectados por la erupción. 

El gobierno guatemalteco ha puesto en marcha un plan nacional de emergencia que incluye la evacuación, búsqueda y rescate en dichas áreas, atención a las víctimas e instalación de albergues para la población. 

Plan International ha puesto en marcha su respuesta humanitaria para apoyar a la infancia en Guatemala. “Estamos particularmente preocupados por la seguridad y el bienestar de los niños y niñas, los más vulnerables en casos de emergencia”, afirma Emilia Sánchez, directora de Incidencia Política de Plan International España. “Necesitamos una rápida y adecuada movilización de fondos por parte de todas las instituciones públicas y sociales para poder hacer frente a esta situación”.

La organización está permanentemente en contacto con el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH), el Equipo Humanitario de Guatemala, CONRED y Redhum para reducir el impacto en las zonas más afectadas tras la erupción.

El volcán Fuego, situado entre los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango, está afectando a un total de 1,7 millones de personas en toda Guatemala y ha provocado columnas de ceniza de más de 6.000 metros de altura y la evacuación de más de 3.000 personas. Las autoridades han confirmado 33 muertos y 46 heridos.

En estos momentos, las autoridades están evaluando el daño a los servicios básicos en las áreas afectadas, incluidos puentes y carreteras, sistemas de electricidad y agua, y evaluando las necesidades para restablecer los servicios y el acceso a las personas afectadas. 

Según Plan International Guatemala, ningún miembro de la organización, ni sus familias, ni las familias de los niños y niñas apadrinados se han visto afectados por la erupción, ya que no viven en esa zona concreta.

La situación de los niños y niñas en Guatemala

Durante los últimos 12 años, Guatemala ha sufrido tres fenómenos naturales de gran magnitud: el huracán Mitch (1998) y las tormentas tropicales Stan (2005) y Ágatha (2010). Debido a su posición geográfica, geológica y tectónica, se trata de un país con numerosas amenazas naturales, lo que sumado a su situación social, económica y de deterioro ambiental, genera altas condiciones de vulnerabilidad.

Además, Guatemala es uno de los países con mayores tasas de desnutrición crónica en el mundo: el 49,8% de las niñas y niños de entre 3 y 59 meses de edad sufren desnutrición crónica, y el porcentaje asciende hasta el 66%, entre las niñas y los niños indígenas. Cifras que aumentan cuando se producen fenómenos naturales como la erupción del volcán Fuego.

Las columnas de ceniza de más de 6.000 metros de altura han provocado la evacuación de más de 3.000 personas. Las autoridades han confirmado 33 muertos y 46 heridos.

El país también posee altos grados de violencia, resultado de un largo proceso de debilitamiento institucional, marginación y desigualdad. La criminalidad se refleja en el alto nivel de homicidios, con tasas medias superiores a los 30 homicidios por cada 100.000 habitantes, una de las tasas más altas a nivel global. 

La respuesta de Plan International

La erupción ha afectado principalmente a las comunidades que vivían en la ladera del volcán y entre las víctimas mortales hay menores de edad. Vivir cerca de los volcanes aumenta la vulnerabilidad de las personas, especialmente de los niños y niñas. Es imprescindible seguir trabajando para prevenir nuevos desastres y reducir los existentes aumentando la preparación para la respuesta, recuperación y el refuerzo de la resiliencia.

“El trabajo de reconstrucción a partir de ahora es enorme, sobre todo si tenemos en cuenta que ya hay casi dos millones de personas afectadas y que Guatemala es uno de los países con tasas de desigualdad más altas de Latinoamérica y el Caribe”, explica Elisa Paz, coordinadora de Programas de Emergencia de Lago Chad y América Latina en Plan International España. “Lo principal en esta  fase de la emergencia es atender las necesidades básicas de las personas más  afectadas, incluyendo refugio y asistencia psicológica”, concluye.