“El Día de Malala no es mi día. Hoy es el día de cada mujer, de cada niño y niña que ha levantado su voz por sus derechos”

“El Día de Malala no es mi día. Hoy es el día de cada mujer, de cada niño y niña que han levantado su voz por sus derechos.” Son las palabras de Malala Yousafzai durante el discurso que el pasado 12 de julio ofreció en la Asamblea General de las Naciones Unidas.

15 de julio de 2013. Son las palabras de Malala Yousafzai durante el discurso que el pasado 12 de julio ofreció en la Asamblea General de las Naciones Unidas. Junto a ella, jóvenes de todo el mundo alzaron su voz para hacer un llamamiento por la educación y pedir a los líderes mundiales que todos los niños y niñas del mundo puedan ver realizado su derecho a acudir a la escuela.

Nurul Indriyani tiene 16 años y vive en Indonesia. Como muchas niñas de su país ha vivido la complicación de ser niña y querer ir a la escuela; sin embargo, ella tiene la oportunidad de recibir clases cada día: ?gracias a la educación, podemos alcanzar nuestros sueños y conseguir una vida más brillante en el futuro. En Indonesia, que los niños y niñas tengan acceso a la escuela, es clave para apoyar el desarrollo del país. Nosotros somos el futuro. La educación es un derecho?. La joven indonesia de 16 años es una de las delegadas juveniles de PLAN que acompañó a Malala para solicitar a la comunidad internacional que priorice los esfuerzos para lograr que el acceso a la educación de la infancia sea una realidad en todo el mundo.

?Los extremistas demostraron lo que más temen, a una niña con un libro?, aseguraba Malala, haciendo referencia al disparo que sufrió el pasado octubre cuando se dirigía a la escuela. ?Los talibanes pensaron que las balas me callarían, pero han fallado. Y del silencio han surgido miles de voces?, dijo con firmeza la joven paquistaní que hace unos días mostraba su apoyo a la campaña de PLAN ?Por Ser Niña? cuyo objetivo principal es la educación de las niñas del mundo.

Acompañada por el por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el ex primer ministro británico Gordon Brown y más de mil jóvenes de todo el mundo, Malala dio voz a los millones de niños y niñas que no van a la escuela: ?un niño, un profesor y una pluma pueden cambiar el mundo. La educación es la única solución. Pongamos la educación primero?.