Más de 7 millones de personas, entre ellas miles de niños y niñas, se han visto afectadas por las inundaciones en las provincias de Shaanxi y Sichuan, ubicadas al noreste y sureste de China.
18 de julio de 2013. Más de 7 millones de personas, entre ellas miles de niños y niñas, se han visto afectadas por las inundaciones en las provincias de Shaanxi y Sichuan, ubicadas al noreste y sureste de China. Las fuertes lluvias que comenzaron el pasado 7 de julio han provocado el desbordamiento de los ríos Yangtze y Amarillo, causando la muerte de 83 personas y dejando al menos 182 desaparecidos.
Según las autoridades locales, en la provincia de Shaanxi, hay hasta el momento 27 muertos y cuatro desaparecidos, de los cuales 20 son de Yan?an, la ciudad más afectada por las lluvias. En siete ciudades de Sichuan, 3.444.000 personas se han visto afectadas por las inundaciones, 68 personas han muerto y 179 continúan desaparecidas.
Los altos niveles alcanzados por el agua han provocado además el derrumbamiento de más de 250.000 casas y han destruido puentes, carreteras y edificios en ambas provincias. Esta situación ha obligado a las escuelas a suspender las clases y miles de alumnos se han visto perjudicados.
Para prevenir mayores desastres a consecuencia de las intensas lluvias, las autoridades locales han reubicado alrededor de 268.000 personas en Sichuan y 240.000 en Shiaanxi. El Departamento de Asuntos Civiles del gobierno ha enviado equipos de ayuda a ambas provincias para montar 5.000 tiendas y distribuir 20.000 mantas a los afectados por las inundaciones.
La oficina de PLAN en China está evaluando los posibles riesgos con el fin de minimizar los daños que pueda sufrir la infancia como consecuencia de esta emergencia.