"Nosotros tenemos que reconstruir nuestro país"

Aunque el terremoto destruyó sus hogares, forzándoles a dormir en la calle con el dolor que supone haber perdido a algunos de sus familiares, estos orgullosos jóvenes haitianos están mostrando su solidaridad ayudando a reconstruir su país. 

Desde el mismo día del seísmo, PLAN recorrió las calles para ayudar a los jóvenes estudiantes que lo perdieron todo, ofreciéndoles apoyo con el que minimizar el impacto sufrido. La mayoría de los colegios, escuelas y universidades fueron destruidas por el terremoto. Algunos de estos grupos de jóvenes, que están siendo apoyados por PLAN, ayudan ahora en las necesidades de casi 20.000 damnificados en 20 zonas del distrito de Croix-des-Bouquet, un barrio periférico de la capital.

?Todos somos víctimas del terremoto. Nadie puede ir a la escuela, los niños están en la calle y duermen en cualquier lugar. Estamos obligados a hacer algo?, dice MC, una joven estudiante de 22 años, que colabora en estas tareas con PLAN.

Todos ellos conocen bien el trabajo realizado por PLAN Haití en sus comunidades durante los últimos 37 años. Pero su conocimiento del entorno ha servido a PLAN para llevar la asistencia de emergencia a los vecinos más necesitados. Durante un par de días ayudaron a PLAN a entregar cientos de kits de primera necesidad y alimentos que varios camiones trajeron desde la República Dominicana. En un solo día colaboraron en la distribución de más de 630 kits familiares y 100 cajas de comida a los niños y familias que se encuentran en un centro de nutrición.

MC explica con entusiasmo su participación: “Nosotros somos los que tenemos que reconstruir el país. Nunca hemos podido hacer este tipo de cosas por este país. Pero ahora creo que tenemos una oportunidad“.

Muchos de ellos no retornan a sus casas después de las largas jornadas de trabajo voluntario. “La gente tiene hambre y no tienen tiendas de campaña. Todos estamos durmiendo a la intemperie “, dice una joven estudiante de 19 años llamada Mideline. 

Incrementar la participación y ser protagonistas de la recuperación

Sólo queremos dar a la gente un descanso“, agrega un joven profesor de 29 años, Jean. Una integrante del personal del PLAN de Haití de nombre Miriam explica: “Hemos trabajado con los jóvenes durante muchos años en términos de liderazgo de la comunidad, siempre hemos actuado con el objetivo de incrementar su participación en el desarrollo de sus comunidades, y creo que esto es una prueba de que están dando lo mejor “.

Aunque hayamos perdido a miembros de la familia o nuestras casas estén destruidas, tenemos que trabajar para reconstruir nuestro país. Así, tanto los empleados del PLAN y de los jóvenes voluntarios estamos aquí para apoyar eso“.

Wesley se graduó en idiomas. Tiene 21 años y un posgrado en idiomas por la Universidad Latina. Dice que hay un sentido de orgullo fuerte entre los jóvenes haitianos, aunque en la actualidad muchos dependen de lograr cosas tan básicas como agua, alimentos y refugio.

El Presidente de la Unión Local de niños, Weskey, asegura: “Necesitamos ayuda ahora mismo, la gente siente demasiado dolor, pero yo soy responsable de mi comunidad, de mi organización“. Perdió su trabajo con el Ministerio en la capital después del terremoto y su futuro es incierto. “No me gusta pedir ayuda. No quiero estar clamando: ‘Dame, dame“. Su sueño es hablar inglés, tener conocimientos de francés y español para trabajar como traductor en el extranjero. “Pero he visto la capacidad de mi país en este momento…”, dice