Gracias al programa de empleo de Plan International en Mali, los miembros de comunidades en las zonas de Goundam y Gourma Rharous trabajan en la reparación de las escuelas locales. El proyecto permite a las familias obtener recursos para atender sus necesidades e involucrar a toda la comunidad en la educación de los niños y niñas, así como favorecer el acceso a una educación de calidad.
Fadimoutou tiene 40 años y es madre de cinco hijos: dos niños y tres niñas. Viven en la región de Tombuctú en Mali, donde ha sido testigo de varias crisis que se han producido en el territorio a lo largo de este tiempo.
Perdió su ganado cuando estalló el conflicto en 2012 y desde entonces ha estado buscando medios que le aporten los ingresos suficientes para atender las necesidades de su familia. Aunque teje alfombras que luego vende en el mercado local apenas puede cubrir lo básico.
Fadimoutou manda a sus tres hijas a la escuela local con las esperanza de que tengan un futuro mejor. Sin embargo, ha visto con impotencia cómo las instalaciones se desmoronan debido a la falta de mantenimiento.
Las escuelas de la zona se encuentran en muy mal estado y tienen pocos recursos. Por eso, la comunidad entera ha acogido con mucho entusiasmo el programa de empleo de Plan International cuyo objetivo es renovar las aulas.
“Fue una gran alegría saber que había sido seleccionada por el comité de la aldea como beneficiaria de este proyecto. En primer lugar, porque las condiciones de aprendizaje y estudio de mis hijas van a mejorar, pero también porque puedo asegurarme unos ingresos para atender las necesidades del hogar. Con el dinero que recibí, pude comprar arroz y ahorrar algo de lo que había ganado para ir cubriendo gastos”, explica Fadimoutou.
Este programa proporciona a los miembros de la comunidad empleo a corto plazo de manera que puedan obtener un sueldo con el que hacerse cargo de sus hijos e hijas y, al mismo tiempo, participar en el desarrollo de sus propias comunidades.
“Este proyecto me ha ayudado a dar una nueva cara a nuestra escuela. Se encontraba en tan mal estado que algunos alumnos y alumnas ni siquiera venían: las pareces se estaban cayendo, la valla prácticamente no existía”, reconoce Agoumour Aguissa, el director del centro.
“Algunos alumnos y alumnas no acudían a las clases debido a la falta de recursos que había. Otros, se incorporaron al principio de año pero abandonaron a medida que avanzaba el curso. Ahora, gracias a la distribución de kits escolares, casi todos los estudiantes que lo habían dejado, han vuelto”, concluye.
El progrmama de empleo fue puesto en marcha por Plain International en Mali con el apoyo de Irish Aid en las áreas de Goundam y Gourma Rharous. Gracias al proyecto, 932 padres y madres han podido trabajar y conseguir algo de dinero mientras apoyaban la educación de sus hijos e hijas. Se han distribuido 1.390 kits escolares en diez centros a lo largo de toda la región como parte del proyecto.