La Asamblea de Madrid se une al movimiento Por Ser Niña de Plan International, que pretende acabar con todas las formas de discriminación y alcanzar a 100 millones de niñas para que puedan aprender, liderar, decidir y prosperar.
La presidenta de la Asamblea de Madrid, la directora general de Mujer de la Comunidad de Madrid, los portavoces de todos grupos parlamentarios y la directora general de Plan International, junto con niños y niñas del colegio Siglo XXI de Moratalaz (Madrid) han participado el pasado viernes día 10 en un acto contra la mutilación genital femenina, donde todos los asistentes se han comprometido a luchar por la erradicación de esta práctica que viola los derechos humanos y de la que han sido víctimas 200 millones de mujeres y niñas en todo el mundo.
La directora general de Plan International, Concha López, ha dado a conocer el trabajo de la organización para combatir la MGF a través de la concienciación y sensibilización de las comunidades y los gobiernos de los países con mayor prevalencia de esta práctica, como Guinea (97%), Egipto (92%), Sierra Leona (90%), Malí (89%), Etiopía (74%) y Guinea Bissau (50%).
Asimismo, ha manifestado que “los Objetivos de Desarrollo Sostenible han marcado como meta la eliminación de la mutilación genital femenina para 2030 y es necesario el compromiso de la comunidad internacional para que se pongan en marcha las medidas y se destinen los fondos necesarios para conseguirlo”.
La mutilación genital es una práctica que atenta contra la vida de las mujeres, acarrea traumas y provoca complicaciones físicas de por vida, como desequilibrios durante la menstruación, dificultades en el parto, hemorragias o infecciones del aparato urinario. En ocasiones, las complicaciones en el parto pueden provocar incluso la muerte de la mujer y el bebé.
Plan International trabaja para implicar a las comunidades que la practican en la erradicación, haciendo que las propias víctimas y sus familias se conviertan en agentes de cambio de normas sociales y culturales muy arraigadas. Además, defiende que la erradicación de esta práctica requiere de un enfoque integral que trabaje en la educación, el empoderamiento de las niñas y mujeres y la sensibilización de las propias comunidades.
Este acto ha contado con el apoyo del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación y se inserta en el marco del movimiento Por Ser Niña, una iniciativa global que busca acabar con todas las formas de discriminación y transformar las relaciones de poder, de manera que todas las niñas del mundo puedan aprender, liderar, decidir y prosperar.