Malaui ha aprobado una enmienda a su constitución para prohibir completamente el matrimonio infantil, en un cambio histórico conseguido tras una fuerte campaña liderada por los y las jóvenes del país y apoyados por ONG como Plan International.
La enmienda, votada y aprobada por el parlamento de Malaui el martes 14 de febrero, elimina finalmente una laguna legal que ha permitido que los niños y niñas de entre 15 y 18 años pudieran contraer matrimonio con consentimiento paterno. Los parlamentarios de Malaui votaron 131 a 2 a favor de eliminar esta disposición.
En Malaui, casi una de cada dos niñas es obligada a casarse: el 46% de las niñas contrae matrimonio antes de los 18 años, lo que situaba a este país del sureste de África como el noveno país del mundo con mayor prevalencia de matrimonio infantil.
“Se trata de un cambio histórico para las futuras generaciones de Malaui y estamos muy contentos de que los jóvenes hayan tenido un papel trascendental en este éxito”, explica Lilly Omondi, directora de Plan International en Malaui, y añade: “Escuchar a los y las jóvenes fue crucial para el proceso. Al asegurarse de que sus voces se tenían en cuenta, han ayudado a garantizar la salud y el futuro de millones de niñas malauíes”.
“Las niñas y mujeres casadas suelen ser obligadas a abandonar su educación, lo que reduce cualquier esperanza de futuro. Las niñas en esta situación corren además mayor riesgo de sufrir violencia, abusos y violaciones”, afirma Concha López, directora general de Plan International en España.
Las jóvenes lideran el cambio
Memory Banda, de 20 años, es una de las jóvenes que ha liderado la campaña y habla desde la experiencia: “Cuando mi hermana tenía solo once años fue obligada a casarse con el hombre que la había dejado embarazada”.
“Por aquel entonces yo era joven y pensaba que esto era lo normal. Pero en seguida me di cuenta de que los abusos que estaba sufriendo en su matrimonio tenían un impacto devastador”, dice Memory, y añade: “Cuando venía a casa, veía que esa persona ya no era mi hermana pequeña”.
Durante la campaña, puesta en marcha en septiembre del año pasado, jóvenes malauíes se unieron a representantes de Plan International en una Conferencia Nacional de Niñas en la que presentaron a la Primera Dama de Malaui una petición global para poner fin al matrimonio infantil con más de 42.000 firmas, recogidas en más de 30 países de todo el mundo, entre ellos España.