CRISIS EN SUDÁN: SE NECESITA AYUDA HUMANITARIA URGENTE, SOLIDARIDAD Y ATENCIÓN

Los responsables de más de 50 organizaciones humanitarias y de derechos humanos han emitido una declaración conjunta en la que solicitan medidas inmediatas para apoyar a los niños, niñas y comunidades afectadas como consecuencia de la crisis en Sudán. 

Cinco meses después del estallido del conflicto en Sudán, la situación humanitaria es alarmante.   

Plan International y más de 50 Organizaciones No Gubernamentales (ONG) se han unido para solicitar medidas urgentes para que la ayuda llegue a la población de Sudán y para que el Consejo de Seguridad de la ONU actúe con rapidez para aprobar una resolución que garantice un acceso humanitario seguro y sin obstáculos, así como para que los donantes aumenten la financiación humanitaria. 

Los niños y niñas sudaneses se enfrentan a graves peligros 

Los ataques continúan en todo el país, mientras el número de fallecidos y la violencia sexual, incluidas las violaciones, aumenta. Las niñas, las mujeres y los menores no acompañados corren un alto riesgo de sufrir violencia cuando intentan huir de sus hogares en busca de protección, o cuando sufren ataques en los lugares donde viven. 

Con más de 5 millones de personas desplazadas, la presión para que los países vecinos apoyen a las personas refugiadas que huyen de la crisis está aumentando. Se prevé que estas cifras sigan creciendo, ya que 6 millones de personas en Sudán están al borde de la hambruna.   

Más de 20 millones de personas en el país sufren escasez de alimentos y 498 niños y niñas han muerto como consecuencia del hambre. Los conflictos han dejado al país con apenas un 20% de sus principales hospitales en funcionamiento, lo que dificulta gravemente al acceso a tratamientos que salvan vidas. 

La financiación y la ayuda deben aumentar 

Plan International ha firmado una declaración conjunta con más de 50 organizaciones humanitarias y de derechos humanos para solicitar un aumento de la ayuda en Sudán. La necesidad es urgente: actualmente solo se ha conseguido el 25% de la financiación necesaria para hacer llegar esta ayuda.  

La crisis se está agudizando y las violaciones de derechos no pueden ser ignoradas. Es necesario poner fin a la persecución de comunidades por su origen étnico. Como hasta el momento los esfuerzos de mediación no han logrado poner fin a la violencia, esta declaración conjunta pide acciones inmediatas para permitir que la ayuda llegue a la población que la necesita, protegiendo a las personas más vulnerables y desafiando el clima de impunidad. 

La crisis en Sudán y sus consecuencias nos transmiten un mensaje claro y rotundo de que es necesario aumentar la ayuda humanitaria y reforzar las vías de paz.  

Lee la declaración conjunta