Plan International lanza una respuesta de emergencia tras el paso del ciclón Mocha por comunidades de Bangladesh y Myanmar. La tormenta, una de las peores que se recuerdan en la región, ha azotado una zona donde ya había unos seis millones de personas que necesitaban ayuda humanitaria y más de un millón de desplazados.
“Estamos preocupados por la población afectada, especialmente aquella que vive en campamentos de desplazados. Los niños, niñas y mujeres jóvenes son especialmente vulnerables en estos contextos, ya que pueden enfrentarse a mayores riesgos de violencia sexual y de género. Desde Plan International, presente tanto en Bangladesh como en Myanmar, estamos trabajando para darles apoyo”, asegura Concha López, directora general de Plan International España.
La organización ya ha empezado a dar apoyo a las comunidades afectadas, incluidas comidas calientes, equipos de emergencia, agua y botiquines de primeros auxilios. Además, sigue muy de cerca la situación meteorológica en ambos países y trabaja con socios locales para que las personas en riesgo sepan cómo actuar en caso de ciclón: los refugios anticiclones más cercanos, los espacios más seguros y los números de contacto de emergencias.
Durante las fuertes tormentas, las necesidades vitales y la protección de los niños, de las niñas y de los desplazados internos, debe ser una prioridad: “El desplazamiento es inquietante para los niños y niñas. Es esencial que hagamos todo lo posible para que, sobre todo, la infancia y las mujeres jóvenes, tengan acceso a un entorno seguro. Plan International pondrá de su parte para protegerlos de la explotación y el abuso, garantizando que reciban una nutrición adecuada, saneamiento e higiene junto con servicios de protección.”, cuenta Kabita Bose, directora general de Plan International Bangladesh.