Con el aumento del desempleo juvenil durante la pandemia, estos cursos de formación profesional están proporcionando un salvavidas a la juventud.
A pesar de los problemas que plantea la pandemia por Covid-19, que se ha extendido a las diez regiones de Camerún, Plan International sigue prestando apoyo a las personas que viven en el noroeste y el suroeste del país en medio del conflicto que se está produciendo en las regiones.
Con el apoyo del Organismo Sueco de Desarrollo Internacional, estamos impartiendo formación profesional a 300 jóvenes vulnerables de Bamenda que han sido desplazados por el conflicto sociopolítico. Algunos han sufrido violencia sexual, otros han sido separados de sus familias y todos ellos han perdido sus medios de vida.
La juventud recibe formación en diversas áreas como informática, sastrería, peluquería, fabricación de abalorios, cristalería, electrónica y mecánica. Al final del curso, se les da el material necesario para que puedan poner en marcha sus propios negocios, lo que les permite ganarse la vida de forma decente.
Todas las medidas de prevención y control de Covid-19 aplicadas en el país por el Gobierno se cumplen estrictamente durante la capacitación, y se han incorporado al curso demostraciones sobre el lavado de manos y otras prácticas de higiene para prevenir la Covid-19.
Marina es una de las instructoras que enseña peluquería. “Los y las participantes fueron desplazados por la crisis. Algunos de ellos están viviendo con familiares, mientras que otros están solos. La formación les ayudará enormemente.”
Los y las participantes fueron desplazados por la crisis. Algunos de ellos están viviendo con familiares, mientras que otros están solos. La formación les ayudará enormemente
Con el aumento del desempleo juvenil durante la pandemia, estos cursos de formación profesional están proporcionando a la juventud un salvavidas. “Les enseño a usar sus manos, y con la formación, podrán ganar un salario decente y comprar su propia comida. Allá donde vayan después de la formación, podrán ganarse la vida. Sobrevivirán.” dice Marina.
Los líderes de la comunidad siempre han apoyado las iniciativas de Plan International, y su continuo apoyo ha sido clave para nuestro éxito hasta ahora. “La actividad de formación es muy buena. Apoya a la infancia y juventud, pero también a sus cuidadores. Podrán mantenerse y ser menos vulnerables en el futuro”, expresó el líder comunitario de una de las zonas donde la juventud están recibiendo la capacitación.
Plan International se ha comprometido a garantizar que las niñas y las jóvenes afectadas por la crisis en Camerún tengan las aptitudes necesarias para obtener un trabajo decente o convertirse en empresarias.”El enfoque que utiliza Plan International es encomiable. Animarlas a participar en las actividades de los espacios amigos de la infancia, así como en la formación profesional, es la combinación perfecta”, dice Marina.