Incluyendo a los niños y niñas con dificultades de aprendizaje en las clases desde casa

Hace seis meses, el gobierno de Ghana cerró todos los centros educativos para ayudar a frenar la propagación de la Covid-19. Como resultado, muchas familias están luchando ahora por mantener la educación de sus hijos e hijas de la mejor manera posible. Para Hannah, una niña de 9 años con dificultades de aprendizaje, el cierre de la escuela la ha dejado particularmente aislada.









Hannah está ahora cursando cuarto de primaria en una escuela de la región de Volta, en Ghana, pero no le gustaba ir a la escuela porque sus compañeros se burlaban de ella porque tiene un ritmo de aprendizaje lento y por sus dificultades para hablar inglés, el idioma oficial del país.

“Me alegré mucho cuando mi padre me dijo que el Presidente había anunciado que teníamos que quedarnos en casa. Extraño a mis amigos y amigas, aunque se burlan de mí porque siempre soy la última en entender lo que dice el profesor”, nos cuenta Hannah, que es una de los millones de niños y niñas de Ghana que se han visto afectados por el cierre de las escuelas.

Para ayudar a que los niños y niñas continúen las clases desde sus hogares, desde Plan International, hemos desarrollado, junto con el Ministerio de Educación, alternativas de aprendizaje a distancia para que los estudiantes puedan continuar con sus estudios y para que los padres, madres, cuidadores y maestros tengan acceso a recursos de educación a distancia y apoyo en estos tiempos de incertidumbre.

otros niños vienen a casa y se unen a mí durante las clases. Ahora me siento muy confiada porque también puedo responder a las preguntas durante la clase

Basándonos en experiencias previas en las que se ha tenido que implementar un sistema de educación a distancia, estamos apoyando el diseño de las clases y las grabamos para difundirlas en todo el país a través de los canales de televisión y radio nacionales.

Para asegurar que Hannah entienda las clases que se imparten a través de la televisión, un facilitador de la comunidad la visita cada día durante el horario lectivo para proporcionarle apoyo adicional y traducir todo a su idioma local.

“Me siento muy feliz cuando el Sr. Azanae viene a ayudarme con clases. Es paciente conmigo y me explica todo lo que el profesor dice en Ewe, para que yo pueda entenderlo. Gracias a su paciencia, otros niños vienen a casa y se unen a mí durante las clases. Ahora me siento muy confiada porque también puedo responder a las preguntas durante la clase”, nos cuenta contenta Hannah.