Tra ha sido instrumental en la creación de cuatro comics de bolsillo que hablan del acoso sexual en el transporte público y que se han distribuido en los autobuses de su ciudad.
Tra tiene 19 años y estudia diseño gráfico en la universidad, pero en su instituto de Hanói al que asistía era activista juvenil y hacia fuertes campañas por la igualdad de género. Ella ha sido instrumental en la creación de cuatro comics de bolsillo que hablan del acoso sexual en el transporte público y que se han distribuido en los autobuses de su ciudad.
Desde pequeña se ha enfrentado a los estereotipos de género: “Yo siempre sentí que tenía las mismas oportunidades que los niños, pero la sociedad vietnamita piensa que hay cosas que las mujeres deben hacer, como quedarse en casa y cocinar. Cuando crecí, la gente me criticaba por mi forma de ser, me decían que era como un chico, ellos quieren que yo tenga el pelo largo y sea muy femenina, pero yo lo odio. Esa no soy yo”.
Aunque su comunidad suele ser bastante segura, muchas chicas han tenido problemas en su trayecto a la escuela: “Algunas han pasado mucho miedo, incluso lloran por lo que han vivido. Ver esta situación me hizo darme cuenta de que la seguridad de las niñas es un gran problema y quería hacer algo al respecto” dice Tra.
Muchas de las chicas incluso han sufrido acoso sexual sin saber que lo era, pensaban que era algo normal y que ellas tenían que soportarlo. Algunas entran en pánico y no tienen confianza para contarlo o pedir ayuda. Por eso Tra creó los cuatro pequeños comics con diferentes historias que muestran situaciones y ayudan a saber qué hacer en caso de acoso o como pueden ayudar a las víctimas. No solo para las chicas sino también para otros pasajeros que ven lo que ocurre y no lo evitan.
En uno de ellos se pueden encontrar distintas sugerencias sobre qué puede hacer una chica si la tocan de manera inapropiada en el autobús: una opción es cubrir parte de su cuerpo con su mochila, otra es moverse a otra parte del autobús, más cerca del conductor.
El cómic también insta a los testigos a no guardar silencio y apoyar a la chica. El resto de las personas en el autobús también puedan ayudar, principalmente los conductores. No es solo responsabilidad de las niñas protegerse. Es la responsabilidad de todos para proteger a las chicas.
“Los comics están hechos en estilo manga y los dibujaron otros integrantes del club. El manga es muy popular en Vietnam por lo que ha sido una buena forma de que la gente lea los comics. Los colocamos en la parada de autobús para que las personas puedan leerlos mientras esperan” Explica Tra.
Esta chica ha conseguido utilizar lo que sabe hacer para empoderar a otras niñas de su ciudad: “Aunque las historias son bastante simples, transmiten muy bien el mensaje. Logramos que las chicas tengan más confianza para protegerse. Ya no tienen miedo y saben que tienen el poder de protegerse y el resto de las personas son más conscientes de los problemas, así que no se quedan callados y toman acción contra el acoso callejero”
