Zimbabue: El país de los 16 idiomas en el que trabajamos por la educación de calidad 

Zimbabue, en el corazón del sur de África, es un país lleno de historia, cultura y paisajes impresionantes. Este país, donde Plan International está presente desde 1986, está formado por mesetas elevadas con un clima templado y limita con Zambia, Mozambique, Botsuana y Sudáfrica. 

En Zimbabue confluyen cuatro países: Zambia, Botsuana, Namibia y Sudáfrica. Una cadena montañosa atraviesa el país, dividiendo los sistemas fluviales del Zambeze y el Limpopo, dos de los ríos más importantes de África. 

El nombre “Zimbabue” significa “casa de piedras”, un reflejo de las antiguas estructuras del país. Tras su independencia en 1980, Zimbabue ha mantenido una rica herencia cultural. El país cuenta con cuatro lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, incluyendo las Cataratas Victoria y las Ruinas del Gran Zimbabue. 

Aunque el inglés es el idioma oficial, solo el 2% de la población lo habla como primera lengua. Zimbabue tiene 16 idiomas oficiales, con el shona y el ndebele como los más hablados. Los visitantes son recibidos con calidez y hospitalidad, lo que refleja la amabilidad de su gente. 

El trabajo de Plan International 

Desde 1986, Plan International trabaja en Zimbabue para promover los derechos de la infancia y la igualdad. Colaboramos con niños, niñas, jóvenes, comunidades y socios para abordar las causas de las desigualdades. 

Nuestras principales áreas de trabajo son: 

  • Educación Inclusiva de Calidad: Aseguramos que todos los niños, y especialmente las niñas, tengan acceso a una educación inclusiva. 
  • Habilidades para la Vida: Apoyamos a las y los jóvenes para que adquieran las habilidades necesarias para romper el ciclo de pobreza. 
  • Protección Infantil: Trabajamos para que la infancia crezca protegida de todas las formas de violencia. 
  • Salud Sexual y Reproductiva: Proporcionamos acceso a información integral sobre salud sexual y reproductiva. 

Trabajamos en diversos distritos como Bulawayo, Harare y Mutare, llegando a los niños, niñas y adolescentes más vulnerables y en situación de exclusión. Nuestro compromiso es claro: no pararemos hasta lograr la igualdad.