Todos debemos manifestarnos contra el matrimonio infantil

El sur de Asia tiene la mayor tasa de matrimonio infantil en todo el mundo, 1 de cada 2 niñas son forzadas a casarse antes de los 18 años. En concreto, en el distrito de Uttar Pradesh se encuentra el mayor número de chicas menores de edad que ya son madres, pero la joven activista Shalini le ha plantado cara a esta práctica.

Shalini tiene 21 años y ha ayudado a cerca de 2.500 niños y niñas de su distrito a obtener certificados de nacimiento para así poder escapar legalmente del matrimonio infantil. Con 17 años Shalini puso fin a su propio matrimonio y, desde entonces, ha impedido una docena de uniones forzadas.

Lleva desde 2010 trabajando como voluntaria en Plan International, su dedicación le ha valido un reconocimiento del gobierno de Uttar Pradesh y el premio al Impacto Social de Plan International India por ser Campeona del cambio.

“Es esencial que las chicas accedan a los estudios. Si no reciben educación, no serán capaces de obtener un trabajo y siempre dependerán de otras personas. La educación para una chica se traduce en independencia, en tomar sus propias decisiones”, explica Shalini

Shalini cree que la clave para acabar con la desigualdad es a través de la educación y la concienciación en materia de protección de la infancia y otros problemas como el trabajo infantil, la discriminación de género, la violencia doméstica y los castigos físicos en las escuelas.

Si no reciben educación, no serán capaces de obtener un trabajo y siempre dependerán de otras personas.

Nuestro primer informe del matrimonio infantil en Asia “Their Time is Now”, subraya muchos de estos conceptos y el segundo informe que se realizó en esta zona “Time To Act”, recomienda una serie de prácticas y estrategias para poner fin al matrimonio infantil en Asia y a nivel mundial para 2030. Hasta entonces, remarcan de la necesidad de que todas las personas involucradas se revelen, como Shalini, contra este tipo de prácticas que amenazan los derechos de la Infancia

En su pueblo describen a Shalini como “una persona que está haciendo un trabajo encomiable, no solo en el pueblo sino también en las comunidades vecinas lo que ha mejorado nuestro pueblo y nuestra comunidad en aspectos como la sanidad, servicios sociales y el matrimonio infantil. Estamos muy orgullosos de ella”

Shalini ayuda a su familia y financia sus propios estudios trabajando como tutora.  Además, ha ayudado a 25 niños y niñas a volver a la escuela y los anima a ir a clase todos los días y motiva a los padres para apoyar y animar a sus hijas a obtener una educación superior

“Quiero inspirar a las chicas que creen que nunca conseguirán sus metas. Les digo que, si quieren cumplir sus sueños, primero tendrán que ser capaces de expresarse por sí mismas y hacerse oír”.