¿Con qué frecuencia cambias tu cepillo de dientes?

Para algunas personas, esta puede parecer una pregunta sin importancia, pero, en realidad, es un reflejo de las grandes desigualdades que enfrentan muchos niños y niñas en Filipinas.





No todas las familias tienen acceso a productos básicos de higiene. Algunas no tienen medios para pagarlos y otras viven en zonas remotas o lejanas a mercados o clínicas dónde obtener estos productos. Lo mismo ocurre con los productos de higiene femenina como las compresas; no todas las niñas pueden acceder fácilmente a ellos.

El coronavirus está revelando y agudizando con crudeza estas desigualdades. 

“Mis dos tías están sin trabajo”, cuenta Gelyn, una niña apadrinada por PLAN INTERNATIONAL. Sin ingresos fijos, su familia tiene problemas para acceder a artículos de primera necesidad.

Como respuesta inmediata, como parte de nuestro proyecto RAISE ABOVE, del Programa de Empoderamiento Económico Juvenil, estamos distribuyendo kits de higiene menstrual a niñas y jóvenes en toda la zona Samar, una de las islas occidentales de Filipinas.

“Cuando comenzó el confinamiento, nuestra vida cotidiana se complicó mucho”, explica Gelyn, de 13 años. “La pandemia nos ha causado muchos problemas”. Gelyn vive con sus tías y su abuela, que vende pescado, sin embargo, se ha visto obligada a cerrar su puesto por la pandemia.

“Debido a las restricciones impuestas en la comunidad, mi abuela no pudía salir a vender pescado”, dice Gelyn, quien además relata que “tuvimos que quedarnos en casa y depender de ayudas externas”.

Cada kit distribuido contiene jabón, cepillos de dientes, pasta de dientes, champú, gel desinfectante de manos, compresas y ropa interior. También se incluye información sobre las medidas de prevención de la COVID-19, consejos de salud y de seguridad.

Pequeños pasos como estos pueden generar grandes cambios entre las comunidades y, lo que es más importante, entre las niñas. “Mi cepillo de dientes ya estaba viejo”, cuenta Gelyn. “Ahora, por fin, puedo cambiarlo”.

Las enfermedades infecciosas como la COVID-19 resultan especialmente peligrosas para las personas mayores. Por eso, Gelyn está muy agradecida por la ayuda que ha recibido para que todos en su familia se mantengan sanos.

“A pesar de todo lo que está pasando, quiero mantener la esperanza”, explica Gelyn. “Sé que las cosas mejorarán poco a poco”.