Como miembro del proyecto “Líderes del Cambio” en Brasil, Luís, de 17 años, dice que ha aprendido mucho sobre la menstruación, un tema del que antes sabía muy poco. “En casa, mis padres no hablaban mucho de la menstruación y tampoco recuerdo que nos contaran nada del tema en la escuela”.
Luís, que vive en una comunidad rural de São Luís, dice que solía pensar que cuando una chica estaba con la regla, significaba que tenía algún tipo de lesión. “Antes de entender lo que era la menstruación, pensaba que era un hematoma o una enfermedad, no entendía qué era realmente”.
Ahora, nos cuenta que está mucho más informado y se siente cómodo hablando del tema con sus amigos y familiares.
El proyecto “Líderes del Cambio”, de Plan International, trabaja con niños y jóvenes para romper los estereotipos de género y acabar con el matrimonio infantil y el embarazo precoz. Cuando se trata del estigma de la menstruación, suelen ser los niños y los hombres quienes perpetúan los mitos y tabúes en torno a este tema, por lo que es fundamental que ellos aprendan desde pequeños que la menstruación es un proceso biológico natural.
“Gabi, la educadora de Plan International, me enseñó mucho sobre el tema. Para mí es algo normal entre las niñas y las mujeres”, dice Luís, quien añade que le gusta tratar a las niñas con respeto. “Un día vi a una chica que había manchado la ropa y simplemente le dije que estaba sangrando. Ella fue a ponerse una compresa y se cambió de ropa”.
Los miembros de este grupo organizan periódicamente talleres de sensibilización con otros alumnos de su escuela, en los que se destacan temas como la menstruación, la igualdad de género y la dinámica de poder entre niños y niñas.
Luís reconoce que ya nota diferencias en el comportamiento de los chicos y cree que las chicas de su escuela son tratadas con más respeto. “No veo que nadie haga bromas o comentarios ofensivos sobre las chicas cuando tienen la regla”.
En Plan International creemos que, para acabar con el estigma de la menstruación, los niños y los hombres deben formar parte de la solución. En una encuesta reciente elaborada por nuestra organización, hablamos con 1.038 chicos y jóvenes brasileños de entre 15 y 24 años y una cuarta parte (el 24%) dijo que pensaba que la regla debía mantenerse en secreto.